La data recopilada con respecto a la distribución del tiempo del Presidente (CEO) que se presentó en el anterior artículo “” revela la extraordinaria complejidad de su rol – la profusión de tipos de trabajo, de actividades y de públicos y la cual es mucho mayor de lo que se había documentado e incluso comprendido previamente. Al examinar el rol del CEO se ha determinado que su trabajo también se puede analizar desde la perspectiva de  seis dimensiones de influencia. Cada una de estas tiene una dualidad – una aparente contradicción, similar al yin y yang – que los CEO deben poder manejar simultáneamente para poder ser efectivos.

Las dimensiones del rol e influencia del CEO

Al gerenciar a través de las siguientes dimensiones de influencia, es fácil para el CEO descuidar los aspectos menos directos, menos tangibles y más humanos de su rol.  Sin esa percepción y sensibilidad el CEO entrega algunas de las palancas más importantes que se requieren para  dirigir la empresa y para realizar cambios:

  • DirectoIndirecto: Los CEO claramente tienen influencia sobre muchos temas y decisiones. Sin embargo, las limitaciones sobre el tiempo y en sus conocimientos  obligan a que mucha de su influencia necesariamente tiene que ser indirecta, a través del uso de mecanismos de integración, de procesos, de estructuras y de normas.
  • Interno – Externo: Mucho del trabajo del CEO es intrínsecamente proactivo y dirigido al público interno y a tareas gerenciales. Sin embargo, su rol es excepcional en relación al grado de involucramiento y de influencia con respecto a numerosos públicos en su deber de representar a la empresa hacia el mundo externo.
  • Proactivo – Reactivo: El grueso del rol del CEO es inherentemente proactivo – involucra anticipar problemas, recolectar datos, conducir análisis y hacer escogencias sólidas y oportunas. Al hacer eso, el CEO establece e impulsa la agenda en la empresa.  Sin embargo, reaccionar apropiadamente a eventos impredecibles y no planificados es uno de los aspectos más determinantes de su rol.
  • Capacidad – Limitación: Al mismo tiempo que el CEO tiene la capacidad e influencia debido a  su posición jerárquica y su acceso a recursos, también enfrenta numerosas limitaciones – frecuentemente no reconocidas – para poder ejercer esas influencias. Están constreñidos en la frecuencia con la cual pueden o es conveniente revertir decisiones que se han traído para su aprobación o en la velocidad con la cual pueden provocar cambios sin asegurar el apoyo y el convencimiento de su equipo de trabajo inmediato y de la Junta Directiva.
  • Tangible – Simbólico: Mucha de la influencia del CEO es muy tangible e involucra decisiones sobre temas como prioridades estratégicas, objetivos de presupuesto y selección de personal, pero parte de su influencia y de mayor impacto es simbólica. Esta nace del significado que la gente asigna a las acciones del CEO, incluyendo elementos cotidianos tales como la forma en la cual visten, los autos que manejan, donde estacionan, donde comen y con quienes hablan y como lo hacen.  Cada uno de estos actos envía mensajes implícitos.
  • Poder – Legitimidad: El CEO tiene enorme poder y autoridad formal y  la ejercen en las muchas formas que se han descrito. Sin embargo, poder, autoridad, competencia e incluso resultados son insuficientes para asegurar su éxito.  Los CEO efectivos combinan poder y autoridad formal con legitimidad y alcanzan esta cuando sus empleados creen en ellos como personas y como líderes.

La importancia de los buenos líderes

El CEO necesita manejar la cultura corporativa asegurando que esta sea un multiplicador de valores, aumentando la productividad de los empleados, sistemas y activos físicos. Así la gente se puede inspirar para ofrecer lo mejor de sí mismos y apasionarse con la posibilidad de cambiar las reglas del juego para mejorar la empresa y de cambiar el mundo. El CEO debe evitar que  la cultura sea un terrible destructor. 

El éxito del CEO tiene enormes consecuencias – buenas y malas – para los empleados, para los clientes, para las comunidades, para la creación de riqueza y para las trayectoria de la economía y hasta de las sociedades. Desempeñar el rol de CEO se ha hecho más difícil a medida que el tamaño y el alcance del trabajo continua creciendo, se eleva la complejidad organizacional, avanza la tecnología, aumenta la competencia y se intensifica la responsabilidad (accountability) del CEO.

Se hace referencia a “How CEOs Manage Time” y “The End of Management” .